Las planchas de troquelado de Kocher+Beck se fabrican con acero al carbono de calidad y este material siempre está sometido a las fluctuaciones de precios de las plantas de fabricación, sobre las que no tenemos ningún control.

El diseño de la plancha de troquelado influye en el precio. Si la construcción es compleja, puede que tenga que consultar con nuestro departamento de CAD sobre su dibujo y mecanizado. Esto añade otra etapa al tiempo de producción y aumenta el coste general de la plancha de troquelado. En el caso de las construcciones con esquinas, alturas múltiples, perforaciones y zonas difíciles de mecanizar, aumenta el tiempo de producción de la plancha de troquelado, lo que también debe tenerse en cuenta en el cálculo.

Los asesores de Kocher+Beck pueden darle numerosas sugerencias para reducir el coste de una plancha de troquelado. Añadir un ligero radio en una esquina puntiaguda y dividir una plancha de troquelado de altura múltiple en 2 planchas de troquelado puede ayudar a reducir el precio.

Cuanto más sencillo sea el diseño, menor será la longitud de la línea y la capacidad de fabricar. Esto ayuda a reducir el coste total de las herramientas. Cuesta más producir las planchas de troquelado que deben fabricarse con tolerancias muy ajustadas, como las planchas de troquelado IML.

Lo mismo ocurre con la aplicación para la que se utiliza la plancha de troquelado. ¿Se necesita un revestimiento o endurecimiento especial? ¿Qué material se corta? ¿El filo debe estar especialmente afilado o tener una altura de corte superior a la altura de corte estándar? Todo esto añade tiempo al proceso de fabricación y, por tanto, un coste adicional a la plancha de troquelado.

Por término medio, una plancha de troquelado de Kocher+Beck puede costar entre algo menos de 60 euros y varios miles de euros. En Kocher+Beck, siempre nos esforzamos por proporcionar a nuestros clientes un producto de calidad adecuado para su aplicación con una excelente relación calidad-precio.